El árbitro del plato, Joe West, tuvo que abandonar el campo al final de la primera entrada del partido que este jueves disputan los Nacionales de Washington y los Azulejos de Toronto tras ser golpeado en la cabeza por el bate que se le soltó a Bo Bichette y comenzó a sangrar.

West, de 67 años, que es el árbitro principal en las Grandes Ligas de Béisbol más veterano, recibió un golpe cerca de la oreja izquierda cuando el bateador de Toronto, Bichette, perdió el agarre mientras golpeaba, y fallaba, el primer lanzamiento lanzado por el abridor de los Nacionales, Erick Fedde.

El entrenador de los Nacionales, Paul Lessard, salió a ver a West y le dio una toalla blanca para presionar contra su cabeza.

Luego, el entrenador salió del campo con West, llevándolo a una rampa que conduce a los vestuarios del campo y la sala de árbitros en el Nationals Park.

El partido, el último de cuatro seguidos entre los equipos, se retrasó durante seis minutos. Cuando se reanudó la acción, Vic Carapazza pasó de su asignación original en la segunda base a detrás del plato, y el juego continuó con tres árbitros.

Bichette, que se había perdido los tres juegos anteriores con un tendón de la corva izquierda apretado, pegó doble en el siguiente lanzamiento de Fedde y dio la vuelta para anotar un sencillo del jardinero izquierdo cubano Lourdes Gurriel Jr.

West debutó como árbitro de Grandes Ligas en 1976, luego se convirtió en miembro del personal a tiempo completo dos años después.

El veterano árbitro inició la campaña del 2020 después de haber trabajado 5.312 partidos de temporada regular en las mayores, segundo después de los 5.370 de Bill Klem.

Aunque el partido se juega en Washington, los Azulejos fueron el equipo "local" -bateando en la mitad inferior de cada entrada- porque el gobierno canadiense no les permitió usar su estadio local en Toronto durante la pandemia de coronavirus.

Eventualmente, los Azulejos usarán un estadio de béisbol de ligas menores en Buffalo (Nueva York) para organizar sus partidos, pero esa instalación aún se está preparando de cara a que cumpla con las especificaciones de las Grandes Ligas.

EFE